LOGO LOGO

Monasterio Benedictino de la Resurrección

Ñaña - Lima
Chucuito - Puno
Peru

Chucuito

Chucuito es el capital del antiguo reino aymara de los Lupacas, antes de la conquista de los Inca, Chucuito fue también, más tarde, en la colonia, un pueblo importante. En efecto, se volvió Casa de Monedas en tiempos virreinales. De allí su título colonial de Ciudad de las Cajas Reales.

De estos hitos históricos destacados, nuestro pueblo conserva varios testimonios y su aire “señorial”, así como una recalcitrante división social entre “jaques” (indígenas) y “mistis” (mestizos, intermediarios del colonizador español).

Sus dos templos coloniales de estilo barroco mestizo altiplánico, entre los más antiguos del Perú, y su Inca Ullo, ruinas probablemente pre incas, son  hitos apreciados en el recorrido turístico alrededor del lago sagrado. Nuestro pequeño museo Wawamarka, perteneciendo a la asociación Alumnos del Perú, es un alto apreciado en la visita del pueblo.

Situado a 3870 metros sobre el nivel del mar, Chucuito domina el lago Titicaca, gozando de una vista y una perspectiva únicas, de las que nuestro monasterio disfruta particularmente.

Pero lo más bello de nuestro pueblo es su gente y su cultura. En el corazón del Collao (nombre de la región desde antes de los Incas), Chucuito conserva, muy vivas en el alma de sus habitantes, las tradiciones y costumbres de su cultura. Pero, lo más fascinante es, sin lugar a duda, la vitalidad de la espiritualidad andina y de su bellísima ritualidad.

Desde un inicio, nuestra comunidad quiso ser parte de este mundo religioso, a través de la amistad de Don José, nuestro Yatiri (sabio andino o sacerdote indígena). Con él y con nuestros vecinos y amigos aymaras, optamos por celebrar los ritos andinos, tanto domésticos como en los cerros tutelares. En el Ande, los cerros son sagrados. Así, nuestro gran protector de Chucuito es el “Achachila (abuelo) Atoja”, con su polo masculino (Awki) y femenino (Tayka). Los habitantes de Chucuito suben hacia él constantemente, para dar culto a Dios.

Nosotros asumimos una respetuosa reciprocidad entre ritualidad católica y ritualidad andina (cristianizada en muchos aspectos), rescatando en ambas la profundidad evangélica más allá de las diferencias, y sin protagonismo de una sobre otra.

Finalmente, no es demás recordar que es en Chucuito donde empezó, en 1990, una importante corriente teológica que hoy se extiende por toda América Latina, en la que nuestra comunidad está activamente implicada: la Teología India, en su vertiente andina. Desde aquí trabajamos, en diálogo, el cómo ser cristiano andino, cristiano desde lo andino.